Curiosidades y Artículos
No hace falta pasar por el quirófano para disimular pequeños defectos o imperfecciones de nuestro cuerpo.
La ropa, nuestro vestuario, puede ser una fuente estupenda para tratar de disimular, o acrecentar ciertos aspectos de nuestro físico. Podemos tanto disimular, como acentuar. Vamos a ver como lo podemos hacer.
1. Si tenemos las caderas anchas podemos disimularlas con faldas rectas y de tonos oscuros, evitando llevar prendas muy ceñidas o pantalones. También se puede desviar la atención luciendo escotes (pero con cuidado y gusto), y joyas llamando la atención de la parte superior de nuestro cuerpo.
2. Si somos bajitos, de piernas cortas, podemos utilizar pantalones rectos de cintura alta, que nos hacen más altos. Hay que evitar las faldas largas y de mucho vuelo, que nos harían más bajos.
3. Si tenemos poco pecho, nos favorecen los tejidos drapeados y poco ajustados, que nos den más volumen. También se pueden utilizar pañuelos al cuello, camisas o blusas con bolsillo a la altura del pecho. Prendas poco ajustadas. Si tenemos mucho pecho, todo lo contrario, prendas más ajustadas y tejidos lisos.
4. Si tenemos la cintura ancha, pantalones y faldas altas, con cinturones anchos que disimulan esta parte. Colores oscuros. Vestidos de corte imperio y chaquetas acampanadas.
5. Si somos muy delgadas, podemos marcar nuestra figura con prendas ajustadas, jersey de escote a pico, etc. O si queremos parecer más voluminosas, y disimular nuestra delgadez, prendas sueltas, faldas de amplios vuelos, jersey gordo, vestidos tres cuartos, etc.
6. Por último tendríamos las distintas combinaciones de baja y gruesa, alta y delgada, bajita y delgada, etc. Sería tomar los consejos anteriormente dados y combinarlos. Algunas veces, una manera de disimular alguna parte de nuestro físico, es remarcar otra para hacerla más importante minimizando el "defectillo" o esa parte que no queremos que se note.