Curiosidades y Artículos
La teoría o el evento del Cisne Negro
Antes del siglo XVll ninguna persona residente en Europa había visto nunca un cisne negro y nadie creía de que existían. De esta manera, los primeros europeos en llegar a Australia se sorprendieron al encontrarse por primera vez con los cisnes negros que allí habitaban. Este último hecho nos demuestra lo limitado que es el aprendizaje mediante la experiencia y la observación.
Surgido históricamente de la frase “rara avis in terris nigroque simillima cygno” (un ave rara en la tierra, y muy parecida a un cisne negro), la Teoría del Cisne Negro de Nassim Nicholas Taleb es un libro de 2007 que habla sobre la importancia para la historia de la humanidad que tienen los eventos sin dirección e inesperados, normalmente ignorados por sus bajas probabilidades de darse, extremos y azarosos.
Son cisnes negros que aparecen luego de ver millones de cisnes blancos, son eventos históricos, artísticos, científicos que se dan sin que los esperemos y nos cambian para siempre. Internet, Hitler, guerras relámpago, el 9/11, obras artísticas, el Gangnam Style…
Desde entonces el término Cisne Negro se ha usado como metáfora para referirse a cualquier hecho que, a priori, parece improbable que pase pero tiene unas mínimas posibilidades de pasar. Según este artículo de Caixabank, para que un suceso se pueda considerar como tal
Cisne Negro debe tener estas 3 propiedades:
- Inesperados: No existe ninguna evidencia de que vayan a suceder (antes de que sucedan).
- Impacto extremo: Son hechos que si suceden tendrán consecuencias importantes para la economía o política mundial.
- Predicción retrospectivo: Una vez sucedido el hecho, se dan evidencias de que dicho hecho se podía haber evitado.
La teoría del cisne negro es una metáfora que, en el ámbito económico, describe aquellos sucesos que ocurren por sorpresa, que ningún analista había previsto ni tenido en cuenta porque, a priori, eran improbables y que, para bien o, generalmente, para mal, terminan teniendo un gran impacto y repercusiones trascendentales.
Se caracterizan por tener predictibilidad retrospectiva
Es decir, una vez que han sucedido, y solo entonces, se dan evidencias de que dicho hecho se podía haber evitado y se crean teorías que explican por qué se llegó a producir. En este sentido, las consecuencias derivadas de uno de estos cisnes negros son uno de los riegos a los que se tiene que hacer frente cuando se opera en los mercados financieros. Por ello, aunque se trata de sucesos con baja probabilidad de que ocurran, sería un grave error ignorarlos. Y aunque es difícil protegerse de un cisne negro en su totalidad (porque no se pueden prever), es importante contar con una cartera diversificada y estructurada con distintas clases de activos para que puedan actuar como contrapesos en el caso de tener que responder a diferentes circunstancias económicas o financieras.
Y es que, aunque la Historia parezca una concatenación de eventos inevitables, está llena de eventos Cisnes Negros, que han cambiado el rumbo de la misma. La Primera Guerra Mundial, el Crack de 1987, la caída de Lehman Brothers, el Brexit o la victoria de Trump en las últimas elecciones en EEUU, son ejemplos de este tipo de terremotos, que no se pudieron prever y que tuvieron importantes consecuencias. Es decir, Cisnes negros, cuya presencia conforme el mundo se ha hecho más complejo y global es más común y a los que los inversores comienzan a acostumbrarse.
En la historia moderna, los descubrimientos científicos, Hiroshima, el Holocausto y el nazismo, la hipercomunicación con el móvil e internet, los atentados y el surgimiento del terrorismo, entre otros tantos sucesos más que fueron observados y vividos con estupefacción, dejando huellas imborrables en la vida humana. Con ellos, según el autor de la teoría, estábamos frente a Cisnes Negros.
( Via: Financial Times)
El mas reciente Cisne negro
Antes de las elecciones presidenciales de los EEUU, se llegaba incluso a cuestionar si Donald Trump acabaría como el candidato final del partido republicano, por lo que, era casi impensable que Trump acabaría como presidente de los EEUU, aunque había posibilidades (Inesperado). Estados Unidos es la primera potencia mundial, y si Trump cumplía con todo lo que estaba prometiendo en la campaña presidencial (construcción de un muro entre EEUU y Méjico, negación del cambio climático… etc), el impacto que tendría ello en la economía mundial sería importante (Impacto extremo). A día de hoy, sabemos que tampoco era tan descabellado ver a Trump como presidente, debido a la mala situación que estaban experimentando los obreros de EEUU (traslado de fábricas), la gente estaba hastiado del inmovilismo político y querían algo diferente (predicción retrospectiva).
Como vemos, los Cisnes Negros previos aunque parecían improbables, han llegado a pasar y el impacto que han tenido ambos sucesos no ha pasado desapercibido, incluyendo en los mercados financieros. El Brexit supuso un hundimiento de la libra esterlina hasta niveles de 1985, una caída de los bonos británicos hasta el mínimo de 1703, entre otros, tan solo un día después de conocerse el Brexit (24 de Junio de 2016).
La subida a la presidencia de los EEUU por parte Trump tuvo impactos similares debido a todas las medidas nacionalistas que proponía el candidato republicano, la par EUR/USD llegó a mínimos del decenio. Tener en cuenta los Cisnes Negros se hace casi imprescindibles, sobre todo si somos inversores, debido al alto impacto que tienen. Algunos analistas predicen que los Cisnes Negros de los mercados financieros para el futuro más reciente puede ser el problema existente entre Corea del Norte y Occidente, La guerra económica entre China y EEUU o el mismo Colapso del famoso Bitcoin.
Los Cisnes Negros del próximo decenio desde una perspectiva más económica, como indican en Caixabank, son la desigualdad económica, la polarización social y los peligros medioambientales.