Curiosidades y Artículos
Técnicas para hacer chuletas
Cómo copiar y no morir en el intento
Hemos recopilado una amplia colección de técnicas para hacer chuletas, así como historias sobre éstas. Sabes que un buen recurso siempre es echar mano de ellas, grandes aliadas en momentos de desesperación.
Con un poco de paciencia, algo de imaginación, unos buenos ojos y nuestra ayuda no tendrás ningún problema para completar esas hojas en blanco que tanto odias
Vamos a colocar a modo de abecedario las mejores chuletas que hemos encontrado. Recuerda que desde El Rincón del Vago aconsejamos que no se copie en los exámenes, es una operación de alto peligro.
De todas formas ya sabes que desde aquí os mantendremos informados de todas aquellas técnicas que los estudiantes puedan utilizar.
Sabes que es responsabilidad tuya la utilización de estas artimañas.
Alo bestia:
Dícese de la técnica consistente en secuestrar al profesor o, en su defecto, a un miembro de su familia. Esta técnica (un poco radical para nuestro gusto) le permite al alumno librarse del examen, ya que a falta de profesor…
Boli «BIC» o similar + alfiler
:
Es muy sencillo. Necesitas un boli transparente y un alfiler (un complemento importante es la paciencia). Consiste en copiar lo más importante del examen en el bolígrafo mediante la técnica del «rayado con alfiler». De esta manera, el interesado podrá leer a trasluz todo lo que haya escrito en el bolígrafo.
Cambiazo o «la ley del mínimo esfuerzo»
:
El alumno necesita un folio y un bolígrafo iguales a los que utilizará en el examen. El día anterior copia todo el temario en dicho folio (o folios) con una letra no excesivamente cuidada. Este material tratado cuidadosamente la noche antes se coloca en el pupitre. Cuando el profesor entregue el exámen, el interesado saca el folio correspondiente a la pregunta en el momento en que aquel esté despistado. Es importante sacar tan solo el folio que responde a lo que preguntan, de lo contrario…¡te descubrirán!
Delante del profesor:
Técnica especialmente destinada para «gente sin complejos». Lo único que importa es copiar. No importa que el profesor esté delante de tus narices porque, pase lo que pase, lo harás. ¿Cómo? Esta es «misión imposible».
Estuche:
Técnica perteneciente a la «escuela tradicional». Consiste en introducir la «chuleta» previamente elaborada en el estuche o plumier con el fin de sacarla en cuanto el profesor se dé la vuelta. Es fundamental que el tamaño de la «chuleta» sea inferior al del estuche…
Falda:
Técnica exclusiva para las chicas (los chicos también pueden probarla pero…seguro que llamarán un poco la atención!). Consiste en introducir la «chuleta» en el dobladillo de la falda. La alumna interesada se ocupará de cruzar cuidadosamente las piernas de modo que facilite la obtención de la ansiada chuleta, que se sacará cuando el profesor no mire las piernas de dicha alumna.
Goma:
Técnica sencilla, ideal para principiantes. Consiste en escribir en la goma de borrar un esquema sencillo del contenido del examen. En el momento en el que el alumno necesite datos concretos hará como que borra algo de lo escrito anteriormente y leerá lo que le interese. Es importante que en el momento anterior a la utilización de la goma de borrar se haya usado el lápiz, al menos para disimular!.
Hilo:
Es una técnica especialmente diseñada para «doctos» en la materia. Sólo necesitas un papel muy estrecho, pero muy largo, y puedes copiar lo que quieras. Lo enrrollas por cada extremo en el mismo sentido de modo que éstos choquen entre sí, atas un hilo fino alrededor para que no se desenrrolle y lo vas girando. De este modo, es como si fuera un pergamino y te cabe perfectamente en la mano.
Imán de nevera:
Imprescindible tener una mesa que sea sensible a los imanes. Haces una «chuleta» de tamaño medio y la colocas debajo del pupitre con dicho imán. Cuando el profesor se despiste mueves el imán con la chuleta hasta una zona que puedas ver con facilidad.
Jersey:
Una técnica bastante sencilla si el que la lleva a cabo tiene el don de la «discreción». Consiste en hacer una reducción de los apuntes (importante que sea de un tamaño que se pueda ver) y pegarlos en la manga del jersey. Pero ¡no en cualquier parte!, sino en la parte interna, de modo que sólo lo veas tú.
Kleenex:
Técnica de gran éxito entre los estudiantes por su sencillez. Consisten en hacer la chuleta directamente sobre el pañuelo de papel. Aquí hay que tener en cuenta el tipo de bolígrafo que usamos. ¡No vayas a usar una pluma o un rotulador!, ya que cuando lo saques la tinta se verá y serás víctima de alguna que otra bronca.
Laxante al profesor:
Consiste en infiltrarse cuidadosamente en la sala de profesores e introducirle un laxante en el café a » tu verdugo». Cuando llegue al examen todo parecerá normal, pero tras un breve espacio de tiempo verás cómo el profe se empieza a «sentir extraño» y tiene que salir corriendo en dirección al W.C. Con lo cual…¡¡¡no hay exámen!!!
Mesa:
Es una técnica que exige preparación. Consiste en copiar todos los apuntes en el pupitre, de modo que con sólo levantar el folio consigas ver el contenido. Es importante que el alumno se encierre en clase un rato antes del examen para llevar a cabo la «operación camuflaje de apuntes». Otro detalle que no podemos olvidar es que se copien en la mesa en la que te vayas a sentar!!!
Ojeando el examen del compañero:
Es una técnica bien sencilla que tan sólo requiere un poco de habilidad visual. Consiste en copiar todo el examen a ese empollón que se sienta delante de ti. ¿Cómo? Muy sencillo. Los días previos al examen tómate un café o una cañita con él o ella (por supuesto, pagas tú). Tienes que ganarte su confianza…y el día del examen recuérdale que «una mano (y no precisamente al cuello) de vez en cuando, no viene mal».
Plancha:
Es una técnica ideal para todos aquellos que quieran experimentar. Consiste en pasar los apuntes a un folio colocando debajo de éste otra hoja en blanco. Hay que copiarlos calcando mucho para que queden las marcas que nos servirán de «huellas» para llegar a nuestro objetivo, que no es otro que el de aprobar el examen. Sobre el folio en blanco en el que hemos calcado los apuntes colocamos un paño y pasamos sobre éste la plancha, de este modo conseguiremos que lo calcado brille y podamos leerlo con facilidad en el examen.
Reloj:
Es una técnica consistente en hacer una chuleta del tamaño de la esfera de tu reloj y pegarla encima de ésta. Es muy importante que se elabore con un cierto orden, ya que si la esfera es redonda hay que saber por dónde debemos empezar a leer.
Silla:
Consiste en colocar la chuleta de una forma estratégica entre la piernas. Pegas la chuleta en la silla, de modo que con una ligero movimiento de piernas puedas leer perfectamente lo que te interesa. Es muy importante que no bajes mucho la cabeza, porque si lo haces el profesor podría pensar algo extraño…
Techo:
Técnica destinada a los aficionados a las alturas. Necesitas tan sólo una escalera y una tiza. Consiste en copiar un esquema de los apuntes en el techo. Aunque parezca una «misión imposible» funciona. Advertencia: Esta técnica puede dañar considerablemente las cervicales del interesado si se practica con cierta asiduidad.
Uñas:
Es una técnica para expertos en el «tatoo profesional».Consiste en hacer breves esquemas en las uñas con un rotulador permanente. Debe ser claro y conciso. Esta técnica es más apropiada para las chicas, ya que los chicos llamarán un poco la atención con este «look».
Ventana:
Técnica consistente en escribir el contenido del examen en la goma de la ventana. Cuando necesites copiar algo, con la excusa del calor (¡esperemos que haga calor!) le pides permiso al profesor para abrir la ventana. De este modo, conseguirás leer todo lo que has escrito con anterioridad. Requisito fundamental: tener buena vista.
W.C.:
Es tan sencillo como salir al baño. Finjes estar enfermo y le pides permiso al profesor para ir al servicio, en el que estará estratégicamente situado el libro de la materia de la cual te examinas. Así, cuando vayas, le echas un ojo al tema y regresas a clase. Es importante que vuelvas con cara de «corderito degollado» y que escribas rápido lo que has leído para que no se te olvide. Recomendaciones: También puedes fingir que sangras por la nariz (pintando un kleenex con rotulador rojo) y, por lo tanto, necesitas salir urgentemente al servicio.
Yema de los dedos:
Esta es otra de las técnicas en las que tendrás que demostrar tus habilidades artísticas. ¡Tienes que escribir la chuleta en tu propia piel!. En esta ocasión, los dedos serán los protagonistas. Si eres diestro escribirás la chuleta en la mano izquierda y viceversa. Es importante que se escriba en el interior de los dedos y, sobre todo, ¡¡¡no levantes la mano para nada!!!
Zapato:
Es una técnica consistente en minimizar la chuleta y pegarla en la suela de los zapatos. Cuando el profesor esté despistado levantas la pierna y miras discretamente lo que has escrito. Es bastante sencilla y tan sólo requiere de un elemento imprescindible: ¡¡¡la discreción!!!! ¡Ah! También es conveniente que se plastifique, porque si el suelo está mojado…