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Un proyecto de Internet ultrarápido desata la ‘Google-locura’
Quien visite estos días la ciudad estadounidense de Topeka, en Kansas (Estados Unidos), se llevará una sorpresa nada más llegar: la localidad se llamará durante todo un mes “Google, Kansas” y, lo más interesante, no se trata del único municipio del país que ha cambiado su nombre por el del conocido buscador de internet.
Esta y otras curiosas iniciativas se han popularizado en EEUU desde que Google anunciara que construirá una red experimental de banda ancha ultra rápida en unas cien ciudades estadounidenses, un proyecto al que numerosas localidades quieren tener acceso.
Unos 1.100 municipios se han inscrito en el concurso y durante los próximos meses, Google estudiará cada una de las solicitudes para, a finales de año -no hay una fecha concreta- anunciar los ganadores.
En las ciudades elegidas se instalará una red experimental de fibra óptica conocida ya como “Fibra Google” que suministrará internet a sus ciudadanos a una velocidad de un gigabit por segundo, cien veces más rápida que la actual.
Las posibilidades empresariales, educativas y de entretenimiento que podría ofrecer este tipo de conexión son inmensas y por ello no es de extrañar que los participantes, especialmente las localidades más pequeñas, estén haciendo lo imposible por darse a conocer y ganar puntos en el singular concurso.
Topeka cambió su nombre por el de “Google, Kansas”, al igual que Sarasota, en Florida, que ha nombrado “Google Island” a una parte de la ciudad cuyo alcalde, además, buceó en un estanque lleno de tiburones como reclamo publicitario.
No es el único primer edil que se ha tirado al agua por Google.
Don Ness, principal dirigente de Duluth, en Minnesota, se lanzó a las gélidas aguas del lago Superior en pantalón corto y camiseta y colgó luego el vídeo en YouTube -propiedad de Google, por cierto- como parte de la campaña de la localidad para hacerse con una de las instalaciones de fibra óptica.
Ness prometió en otro vídeo llamar “Google Fiber” (”Fibra Google”, en español) a los primeros bebés varones nacidos en la localidad y “Googlette Fiber” a las primeras niñas, pero todo se trataba, por supuesto, de una broma.
Stephanie Rawlings-Blake, alcaldesa de Baltimore, Maryland, ha nombrado a un empresario de internet local llamado Tom Loveland como “Zar Google” de la localidad, cargo que le otorga competencias en los asuntos relacionados con la candidatura del municipio.
Como otras ciudades participantes, Baltimore también ha lanzado una web de apoyo al proyecto, páginas en Facebook y Twitter y un canal en YouTube.
Las redes sociales online son también una herramienta fundamental en la candidatura de Boulder, Colorado, que ha pedido a sus ciudadanos que “hagan vídeos, envíen tweets, blogueen y cambien cada hora su estatus en Facebook” para mostrar lo importante que es una rápida conexión a internet en la ciudad.
En la carrera por ganar los favores de Google hay también localidades como San Francisco, Seattle, Filadelfia o Nueva Orleans, si bien estas grandes urbes están peor posicionadas que las ciudades pequeñas porque el buscador ha señalado que favorecerá a comunidades con deficiente acceso a internet o “sin acceso de ningún tipo”.
Entre los expertos del sector se han iniciado las apuestas para ver qué municipios serán los elegidos. David Greiner, de la consultora tecnológica Steketee Greiner and Co., elaboró un estudio para medir la popularidad de cada candidata basándose en las “conversaciones online” -comentarios en blogs o presencia en redes sociales, por ejemplo- sobre cada una de ellas.
La primera era Duluth, en Minesota, seguida de Grand Rapids, en Michigan, Topeka en Kansas, Fresno en California y Sarasota en Florida.
En su blog corporativo, Google ha agradecido a todos sus esfuerzos y asegurado que el objetivo es beneficiar a entre 50.000 y 500.000 ciudadanos con este proyecto.
“Independientemente de dónde decidamos construir, esperamos aprender lecciones que ayuden a mejorar el acceso a internet en todas partes. Después de todo, no deberías tener que saltar a lagos helados o piscinas llenas de tiburones para tener conexión de banda ancha”, añadió Google.
Con información de EFE
Foto: Reuters